La remodelación del puente subterráneo fue un esfuerzo conjunto entre las autoridades locales y estos cuatro talentosos artistas de la zona. El objetivo era revitalizar este espacio público, que anteriormente había caído en desuso y presentaba un aspecto descuidado. La visión era convertirlo en una representación visual de la rica cultura y tradición de Zacatecas.
Dux, Demer, Arce y Bucker, bajo la dirección de expertos en arte urbano, comenzaron a trabajar en la creación de murales que retrataran la historia, la identidad y la herencia cultural de Zacatecas. Cada mural se convirtió en una ventana al pasado y al presente de la ciudad, destacando elementos icónicos como el Cerro de la Bufa, la minería, la música tradicional, la arquitectura colonial y la artesanía local.